Consejos para una buena conservación
Es importante mantener la carne siempre en el frigorífico, preferentemente a una temperatura inferior a 4ºC.
El plazo máximo de consumo preferente será en general antes de los 3 ó 4 días. Las carnes con más recubrimiento de grasa, tienen una mayor duración, mientras que la carne picada es la que presenta una menor durabilidad (24-48 horas).
No hay que confundir un color más oscuro de la carne, por ejemplo en los filetes del fondo de una bandeja envasada, con una peor calidad. La causa es que la mioglobina, que es la proteína que le da color, cuando no tiene oxígeno, se oscurece. Por ello, la parte que no está en contacto con el aire tiene un color oscuro. Separe las piezas y déjelas en contacto con el aire y verá como el color se aclara y se vuelve rojo-rosáceo.
- Saque la carne del frigorífico 20 minutos antes de cocinarla, para evitar que suelte agua.
- No caliente excesivamente el aceite.
- Ponga la sal antes de quitar la carne de la sartén, y así evitará que suelte agua.
- Evite cortar los filetes muy finos o se pondrán muy duros.
- No congele la carne en frigoríficos de menos de cuatro estrellas.
- Ni en paquetes muy gruesos.
- Pasar la carne del congelador al frigorífico 24h antes.
- Para que esté jugosa, debe tener un poco de grasa exterior
- La carne aporta muchas vitaminas y hierro.
- La carne estará más blanda cuantos más dias pase en la cámara.
Conservación y preparación de la carne
Si congela la carne, siempre por debajo de los -18º C (se requiere congelador con mínimo de 3 estrellas), la carne se mantiene en perfectas condiciones durante meses. Es aconsejable que la congelación no se realice con bandejas (éstas están hechas de un material plástico que podría pasar a la carne).
Como norma, las carnes de mayor calidad resultan más tiernas y sabrosas con temperaturas de cocinado altas y escaso tiempo de cocción, mientras que las de calidad inferior (que contienen más grasa) proporcionan mejores resultados de sabor y textura si son cocidas durante tiempos dilatados y a temperatura más bien baja.
Si limpia la carne con agua, perderá sangre y por tanto quedará más seca. Hágalo con un papel de cocina.